Musas de Poydel: PilsFerrer
- Itziar Llano Martin
- 9 jun
- 4 Min. de lectura
Actualizado: 30 jun
Pilar García-Ferrer, más conocida como Pilsferrer, es mucho más que una artista visual. Arquitecta de formación, interiorista y creadora de collages con un universo muy personal, ha construido una identidad estética reconocible por su sensibilidad, el equilibrio entre lo onírico y lo cotidiano, y una mirada muy particular sobre la belleza.
En esta entrevista nos acercamos a una faceta quizá menos conocida: su conexión con Poydel y La Mer. Hablamos con Pilar sobre cómo surgen las colaboraciones que de verdad la representan, qué valores y estéticas comparte con estas marcas, y cómo entiende el arte como un puente entre lo íntimo y lo colectivo.
¿Cómo describirías tu estilo personal y qué lo inspira?
Mi estilo de vestir diría que es, al igual que mis proyectos de arquitectura, muy ecléctico. Combino piezas actuales con otras heredadas que han tenido una larga vida y, como son de tanta calidad, perduran en el tiempo y pueden pasar de generación en generación. Me inspiran muchas cosas: lo cotidiano, mi familia, los viajes, los colores, una exposición... Siempre estoy con la alerta puesta para recibir impactos y coger inspiración de cualquier sitio.
2. ¿Qué papel juega el cuidado personal en tu día a día?
El cuidado personal es algo fundamental. Como es algo que ya hago casi de forma automática, me ayuda a desconectar, a tener tiempo para mí misma. Es una forma de reconectar conmigo y regalarme una pausa necesaria en medio del ruido.
3. ¿Qué rutinas de cuidado de la piel sigues antes de un evento importante?
Siempre sigo una rutina constante: limpieza profunda e hidratación. Es vital para que el maquillaje luzca bien. Para eso, no hay mejor tratamiento que Crème de La Mer, que es uno de mis imprescindibles.
4. ¿Tienes algún consejo o truco de belleza que siempre sigas?
El mejor truco de belleza es dormir bien. Y si lo puedes complementar con una buena crema de noche, como la nueva de La Mer, mejor aún. Es ideal para pieles sensibles como la mía, porque es una alternativa al retinol. Además, me encanta que puedo aplicármela e irme directa a dormir sin preocuparme, gracias a su tecnología a prueba de almohadas.
5. ¿Qué importancia das a la calidad y exclusividad en los productos que eliges?
La calidad es esencial. Tanto en moda como en belleza, prefiero invertir en algo que sé que va a durar, que está bien hecho, que tiene intención. Un buen vestido o una buena crema no son un gasto, son una inversión. Cuando algo está bien hecho, lo notas, y tu piel también lo agradece.
6. ¿Cómo conociste a Poydel?
Conocí a Poydel a través de una amiga que me habló maravillas de la marca. Me enamoré enseguida de su filosofía, su cuidado por los detalles y la forma tan especial en la que entienden la moda: desde la calidad, la durabilidad y el alma de cada pieza.
7. ¿Qué es lo que más te gusta de los diseños de Poydel?
Me encanta la elegancia atemporal que tienen. Son diseños que no siguen tendencias pasajeras, sino que están pensados para durar, para acompañarte en momentos importantes. Cada prenda tiene una historia, una intención, y eso se nota.
8. ¿Tienes un vestido favorito de Poydel? ¿Cuándo te lo pusiste?
Sí, tengo uno que adoro. Me lo puse en la boda de una amiga muy querida, y fue un día tan especial que lo guardo con un gran cariño.
9. ¿Cómo eliges los productos de belleza y cuidado personal?
No me guío por tendencias, sino por lo que realmente necesita mi piel. Me dejo aconsejar por profesionales y siempre intento que sean productos de alta gama, que sé que funcionarán conmigo. Lo barato muchas veces sale caro, y en belleza, eso se nota enseguida.
10. ¿Por qué tus valores encajan con marcas como Poydel y La Mer?
Porque compartimos una visión basada en la responsabilidad, el respeto al entorno, la calidad y la durabilidad. Me siento muy identificada con la cultura del “no fast beauty o fast fashion”. Me gusta invertir en cosas que sé que voy a conservar, que tienen un propósito más allá de lo estético. Valoro mucho lo que está hecho con conciencia y alma.
11. ¿Alguna anécdota emotiva relacionada con un evento importante?
Recuerdo una ocasión en la que llevaba un vestido heredado de mi madre, pero adaptado a mi estilo. Fue en una cena familiar muy emotiva, y todo el mundo me decía que parecía sacado de otra época. Para mí fue muy especial sentir que llevaba conmigo su energía, su historia.
12. ¿Qué significa para ti sentirte radiante en una ocasión especial?
Sentirme radiante es sentirme conectada conmigo misma. No tiene tanto que ver con lo externo, sino con cómo me siento por dentro. Es ese equilibrio entre estar cómoda, cuidada y segura. Cuando eso ocurre, todo lo demás fluye.
13. ¿Cómo combinas tu rutina de belleza con un estilo de vida ocupado?
La clave está en la constancia y en simplificar. Tengo una rutina clara y eficaz, que puedo seguir incluso en días caóticos. Además, uso productos que sé que funcionan y no me hacen perder tiempo. La nueva crema de noche de La Mer, por ejemplo, es perfecta para eso: me la aplico y listo.
14. Si pudieras dar un solo consejo a futuras novias o invitadas, ¿cuál sería?
Que disfruten el momento. Que no se obsesionen con estar perfectas, sino con sentirse bien, porque al final lo que realmente se nota es la energía con la que vives ese día. Y, por supuesto, que no prueben rutinas nuevas a última hora. Lo mejor es confiar en productos de calidad y mantenerse fiel a lo que ya saben que les funciona. Una piel equilibrada y cuidada no se logra en un día, y contar con tus rutinas de siempre, pero con buenos productos ya que marca la diferencia.
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